Alemania quiso dominar el mundo, hacerlo suyo, de un plumazo, en unas pocas décadas; aun hoy, esto suscita cientos de preguntas que debidamente abordadas generarían apasionantes debates, pero sigue habiendo 400.000 documentos secretos; y sumen lo que no se documenta.
El esoterismo nazi era un componente de la creación y fijación de mitos y leyendas que cimentaran una nueva religión. Parece locura, pero los que directamente se ocupaban de ello creían en lo que hacían. Habría que preguntarse quién los colocó en esos puestos.
Tienen un reportaje en el enlace que les introducirá en el tema, y para estudios más serios el libro que recomendamos.
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